Frente
a quienes desde posiciones privilegiadas afirman que en España empieza
a amanecer (otra vez), a pie de calle todos sabemos que a los más
necesitados aún les queda mucha noche por vivir, que incluso la mayoría de
ellos, lamentablemente, no volverán a conocer ya tiempos mejores, que a día de
hoy sólo los que perdieron su empleo este año han dejado de tener miedo a
perderlo, y con ese temor caminan cada día junto a la frontera que separa las
clases medias de la pobreza.
La
solidaridad sólo es un cuento en boca de los que nunca la ejercen o lo hacen
desde el exhibicionismo caritativo, como ocurría en esa imperecedera obra
maestra del cine titulada Plácido, donde los ricos subastaban a los pobres del
municipio para determinar a cuál de ellos sentaban a su mesa en Nochebuena.
Radicalmente alejada de esta actitud, la escritora Carolina Molina pensó que
la solidaridad sí podía, por el contrario, viajar a lomos de un libro de
cuentos, aunque fuera modestamente, como por otro lado corresponde con el papel
que la literatura juega en nuestra sociedad. Imaginó Carolina una antología de
relatos que a un tiempo reuniera en sus páginas a un buen puñado de escritores
vinculados de una u otra manera a la ciudad de Granada y permitiera, con su
edición, ayudar a los más desfavorecidos a través del Banco de Alimentos, una
organización sin ánimo de lucro a la que irían destinados los beneficios
obtenidos con el libro. Esa antología existe ya y lleva el significativo título
de Cuentos engranados, y he de agradecerle a Carolina Molina el
que me ofreciera la oportunidad de embarcarme en este proyecto junto con los
otros cincuenta y cuatro escritores que aparecen en ella, entre los que está
Medardo Fraile, fallecido este mismo año y a quien justamente está dedicado el
libro.
10 comentarios:
Iniciativas como esta, de Carolina Molina, son reconfortantes y te obligan a pensar que todavía queda solución para estos tiempos aciagos. Enhorabuena a Carolina por la iniciativa y a ti por tu participación, amigo Juan. Un abrazo y felices días.
Respecto de lo de que estamos ante un nuevo amanecer que nos cuentan ya se pronunció Marx. Pero no el filósofo alemán, sino el hermano e Harpo y Zepo. "A quien va acreer usted ¿a mí o a sus propios ojos?".
Preciosa iniciativa sobre la que se podría decir que sobran las palabras, si no fuese debido a que es precisamente la palabra la que toma cuerpo en un proyecto sobre el que no voy a desarrollar elogios. El mejor elogio es hacerse con él cuanto antes. Un abrazo y felices fiestas.
El otro día, no recuerdo dónde, comentaba acerca de creer o no en los milagros. Hechos como la bonita iniciativa de Carolina Molina hacen que siga creyendo en ellos gracias a que todavía existe gente buena.
Un beso.
Una iniciativa genial y necesaria. Mi enhorabuena, Juan. Me haré con él, naturalmente. Un abrazo
Mi enhorabuena! Tus palabras son realidades y, la causa, merece la pena vivirla.
La anotaré para cuando mi economía pueda permitirse algunos gastos. Pertenezco a los parias de la sociedad que con salud y comida nos conformamos.
Un abrazo y felices! Anna
me ha encantado encontrarte
Un gesto muy noble y solidario. Se hace cada vez más necesario que la gente se preocupe de la gente porque ya sabes cómo va ésto.
Pero en realidad, yo pasaba por aquí para desearte ¡cómo no!,mucha felicidad, en ese lugar dónde te refugies, al lado de tu gente más querida.
Sobran las palabras, se quedan los sentimientos y las afinidades.
Un abrazo, Juan
Pues ahí estamos, entre las páginas que anuncias y que la buena de Carolina ideo con tan hermosos fines.
Ya me cuentas cuando me leas.
Sonrío.
Feliz año, amigo.
Gracias por tan sinceras y contundentes palabras dando a conocer nuestra obra.
Por cierto, gran película Plácido, para mí la mejor de Berlanga, que cobra actualidad en estos tiempos de hierro.
Saludos y Salud.
Je´sus Cano, coordinador de "Cuentos engranados",
JESÚS CANO: Enhorabuena por el trabajo que habéis hecho Carolina y tú, que no habrá sido nada fácil. Y mis mejores deseos para esa presentación el 20. Un abrazo.
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